Tu gestación fue lenta, igual que violento tu nacimiento. Eres producto de un conjunto de tensiones enfrentadas que aspiran al equilibrio.

Tu gestación fue lenta, igual que violento tu nacimiento. Eres producto de un conjunto de tensiones enfrentadas que aspiran al equilibrio.

Tu gestación fue lenta, igual que violento tu nacimiento. Eres producto de un conjunto de tensiones enfrentadas que aspiran al equilibrio.

Este papel que te arma mantiene la fibra tensa, paralela al lomo, para que no se combe, para que no se rice, para que mantengas la compostura. La fuerza que pongo en el pasar de página es la que debo, nada de cargas innecesarias de estuco por el temor del lego a la transparencia. Tienes el blanco de la materia prima finamente escogida, no el del cloro que todo lo abrasa. Tu hilo es firme, la cola lechosa, has sido acabado por el tacto humano no por el frío percutir de una máquina.

Este papel que te arma mantiene la fibra tensa, paralela al lomo, para que no se combe, para que no se rice, para que mantengas la compostura. La fuerza que pongo en el pasar de página es la que debo, nada de cargas innecesarias de estuco por el temor del lego a la transparencia. Tienes el blanco de la materia prima finamente escogida, no el del cloro que todo lo abrasa. Tu hilo es firme, la cola lechosa, has sido acabado por el tacto humano no por el frío percutir de una máquina.

Este papel que te arma mantiene la fibra tensa, paralela al lomo, para que no se combe, para que no se rice, para que mantengas la compostura. La fuerza que pongo en el pasar de página es la que debo, nada de cargas innecesarias de estuco por el temor del lego a la transparencia. Tienes el blanco de la materia prima finamente escogida, no el del cloro que todo lo abrasa. Tu hilo es firme, la cola lechosa, has sido acabado por el tacto humano no por el frío percutir de una máquina.

Pocos sabrán de tu rareza. Devienes de un oficio amenazado, de una artesanía que requiere de tiempo, dedicación y exigencia. Todo el saber que acumulas en tanto estructura tiene su fin en la guarda y cuidado de aquello que contienes. Más allá de las cubiertas, los pliegos de papel impreso que te dan cuerpo son asimismo receptores de un oficio complementario, igual de vocacional, igual de voluntarioso: el de los productores gráficos.

Pocos sabrán de tu rareza. Devienes de un oficio amenazado, de una artesanía que requiere de tiempo, dedicación y exigencia. Todo el saber que acumulas en tanto estructura tiene su fin en la guarda y cuidado de aquello que contienes. Más allá de las cubiertas, los pliegos de papel impreso que te dan cuerpo son asimismo receptores de un oficio complementario, igual de vocacional, igual de voluntarioso: el de los productores gráficos.

Pocos sabrán de tu rareza. Devienes de un oficio amenazado, de una artesanía que requiere de tiempo, dedicación y exigencia. Todo el saber que acumulas en tanto estructura tiene su fin en la guarda y cuidado de aquello que contienes. Más allá de las cubiertas, los pliegos de papel impreso que te dan cuerpo son asimismo receptores de un oficio complementario, igual de vocacional, igual de voluntarioso: el de los productores gráficos.